En estas páginas Primo Levi, Franz Kafka, Evgenia Ginzburg, MilenaJesenska, Dolores Ibárruri o Walter Benjamin mezclan sus tragedias con las de personajes ficticios. Todos ellos comparten un estigma: un día despiertan convertidos en lo que otros cuentan de ellos, en lo quealguien que no les ha conocido cuenta que le han contado, en lo quealguien que les odia imagina que son. Perseguidos por la infamia yarrojados de su casa y de su país, se ven obligados a abandonar susvidas.Sefarad, nombre que en la tradición hebrea se da a España, designaaquí todos los exilios posibles. El Holocausto y el nazismo, el Gulag, la guerra civil española, el Imperio austrohúngaro, la Inquisición yla expulsión de los judíos articulan a través de cada capítulo unasinfonía en la que la idea coral es una sola: la intolerancia, lapersecución y la irracionalidad que asolan la historia de lahumanidad, y que dan lugar al título. Antonio Muñoz Molina nos ofrece una aproximación al mundo de losexcluidos a través de este homenaje a la memoria.
En estas páginas Primo Levi, Franz Kafka, Evgenia Ginzburg, MilenaJesenska, Dolores Ibárruri o Walter Benjamin mezclan sus tragedias con las de personajes ficticios. Todos ellos comparten un estigma: un día despiertan convertidos en lo que otros cuentan de ellos, en lo quealguien que no les ha conocido cuenta que le han contado, en lo quealguien que les odia imagina que son. Perseguidos por la infamia yarrojados de su casa y de su país, se ven obligados a abandonar susvidas.
Sefarad, nombre que en la tradición hebrea se da a España, designaaquí todos los exilios posibles. El Holocausto y el nazismo, el Gulag, la guerra civil española, el Imperio austrohúngaro, la Inquisición yla expulsión de los judíos articulan a través de cada capítulo unasinfonía en la que la idea coral es una sola: la intolerancia, lapersecución y la irracionalidad que asolan la historia de lahumanidad, y que dan lugar al título.
Antonio Muñoz Molina nos ofrece una aproximación al mundo de losexcluidos a través de este homenaje a la memoria.