Antonio Orihuela plantea aquí un repaso lleno de referencias sobre lacontracultura en España entre 1962 y 1982. Y recorre su nómina congran cantidad de nombres y movimientos en toda la geografía ibéricadesde la poesía, la música popular, el cómic, las revistas, el cine,el retomado anarquismo, el movimiento homosexual, las tribus urbanas o las artes performativas y plásticas más provocadoras. Además derevisar globalmente lo contracultural en busca de una verdaderadisidencia en la cultura de masas, Orihuela rastrea, desde unaposición crítica, la capacidad de desactivación, fagocitación ytravestismo del «estilo de vida» capitalista, llegado a España con elTardofranquismo y la Transición, a la vez que reflexiona sobre elpapel que jugaron las drogas y el control institucional sobrecualquier tipo de expresión cultural.