Durante las últimas décadas del siglo xix, numerosos escritoresespañoles e hispanoamericanos conocieron en París a Oscar Wilde, elautor más popular y polémico del momento. Benito Pérez Galdós, RubénDarío, los hermanos Antonio y Manuel Machado, Pío Baroja, AlejandroSawa, Dorio de Gádex... estrecharon la mano lechosa y gordezuela delgenio británico. Algunos gozaron y presumieron de su amistad yescribieron sobre él. Otros se limitaron a seguir su mal ejemplo y aregodearse escuchándole, conscientes de que la obra de Wilde no es más que un pálido reflejo de lo que fue su conversación, su oratoria.José Esteban ha recogido anécdotas y escritos de todos los queadmiraron, trataron de cerca y gozaron del creador de Dorian Grey, las luces y sombras de un genio que antepuso el arte a la moral de suépoca.