Si está claro que lo que queremos es ser felices, ¿por qué nos ponemos tantas trabas para conseguirlo?Pocos refranes han sido más perjudiciales que ese que dice que al maltiempo hay que ponerle buena cara. Al mal tiempo hay que ponerlelágrimas o tristeza. Y al bueno, sonrisas y alegría. Saber gestionarnuestras emociones no es esconderlas ni suprimirlas, es reconocerlas y manejarlas con sentido. Tras muchos años de consulta, la doctoraAnabel Gonzalez nos brinda esta pequeña guía de supervivenciaemocional que nos ayudará a gestionar mejor nuestras emociones y aaprender a convivir con los malos momentos. Porque la clave parasentirnos a gusto con nosotros mismos y con nuestra vida estáprecisamente en saber llevar bien los días malos.