EDICIÓN ESPECIAL CONMEMORATIVA DEL 10º ANIVERSARIO.MÁS DE 100.000 EJEMPLARES VENDIDOS EN ESPAÑA.UNA PROTAGONISTA DE ÉPOCA, UNA NOVELA INOLVIDABLE. «Aquel verano de1889, yo tenía once años y era la única chica de siete hermanos.
¿Os podéis imaginar una situación peor?Me llamo Calpurnia Virginia Tate...»Calpurnia, Callie Vee, es una niña que vive en un pueblo de Texas. A pesar de que su madre insiste enque aprenda a tocar el piano, coser y cocinar, ella está másinteresada en lo que ocurre tras la puerta cerrada de la biblioteca, o en el laboratorio de su abuelo.Poco a poco irá ganándose a este señor un tanto huraño y empezará a colaborar con él en sus observacionesdel medio natural, aprenderá quién es Darwin, qué son las especies ylas subespecies, y también lo idiotas que se vuelven los hermanosmayores cuando se enamoran.«La evolución de Calpurnia Tate es lanovela más deliciosa que he leído en muchos, muchos años... La luchade Callie porque le permitan tener curiosidad intelectual resultarefrescante, divertida y muy acertada incluso para la época en quevivimos.»The New Yorker
EDICIÓN ESPECIAL CONMEMORATIVA DEL 10º ANIVERSARIO.MÁS DE 100.000 EJEMPLARES VENDIDOS EN ESPAÑA.UNA PROTAGONISTA DE ÉPOCA, UNA NOVELA INOLVIDABLE. «Aquel verano de1889, yo tenía once años y era la única chica de siete hermanos.
¿Os podéis imaginar una situación peor?Me llamo Calpurnia Virginia Tate...»Calpurnia, Callie Vee, es una niña que vive en un pueblo de Texas. A pesar de que su madre insiste enque aprenda a tocar el piano, coser y cocinar, ella está másinteresada en lo que ocurre tras la puerta cerrada de la biblioteca, o en el laboratorio de su abuelo.Poco a poco irá ganándose a este señor un tanto huraño y empezará a colaborar con él en sus observacionesdel medio natural, aprenderá quién es Darwin, qué son las especies ylas subespecies, y también lo idiotas que se vuelven los hermanosmayores cuando se enamoran.«La evolución de Calpurnia Tate es lanovela más deliciosa que he leído en muchos, muchos años... La luchade Callie porque le permitan tener curiosidad intelectual resultarefrescante, divertida y muy acertada incluso para la época en quevivimos.»The New Yorker