Se ha dicho que Ramón Gómez de la Serna fue para la radio lo queEisenstein para el montaje cinematográfico. Desde el momento en que se crea Unión Radio Madrid, a mediados de 1925, Ramón se convierte encolaborador asiduo y durante años se dedica a una extraordinaria labor de experimentación estética y literaria ante el micrófono,interviniendo decisivamente en la definición de todas las modalidadesexpresivas del nuevo medio de comunicación. En la introducción alpresente libro, a cargo del hispanista Nigel Dennis, se pasa revista a las diversas aportaciones del escritor al desarrollo de ese mundosinhilista de la época de preguerra. Asimismo se recogen el total delas greguerías que dedicó al fenómeno de la radio, greguerías quefueron leídas primero en los estudios de Unión Radio Madrid ypublicadas con posterioridad en la revista Ondas. Desde entonces estas Greguerías onduladas de Ramón han permanecido prácticamente inéditas, pues nunca han formado parte de sus obras completas ni han sidorecogidas como libro independiente, a pesar de que constituyen, segúnla certera frase de José Díaz Fernández, el «primer rugido de la obraradiotelefónica» en España.