No pocas veces puede ocurrir que, paseando por la naturaleza, nosfijemos, con mayor o menor atención, en cuanto nos rodea: los árbolesy los cursos de agua, las colinas y las construcciones, la luz y lasnubes en sus infinitas transformaciones. Detenerse en un detalle oadvertir varios a la vez no basta, sin embargo, para tener concienciade estar ante un "paisaje".