«Infarto es una palabra muy fea, vil.» Lo dice Julio Anguita trassufrir dos de ellos, una angina de pecho y una operación en la que lecolocaron un triple by-pass. Sin embargo, la enfermedad no le ha hecho disminuir su actividad: acude al gimnasio tres veces a la semana,recorre toda España como conferenciante y continúa su intenso ritmointelectual.Ha decidido escribir este libro como estímulo vital para aquellos quese sientan acorralados por un diagnóstico que nadie desea escucharnunca, para quitar la carga maldita que acompaña al temido infarto ypara animar a las personas que estén en su misma situación,transmitiéndoles el convencimiento y la experiencia de que se puedecontinuar haciendo una vida corriente sin ningún temor.