Este libro presenta la trayectoria vital de cinco personalidadesactuales que, mediante libros, artículos, discursos o películas,comparten la misma convicción: la existencia humana no puedeconcebirse sin los demás.Svetlana Alexievich, historiadora y periodista, ha puesto voz a laspequeñas voces. Antonio Guterres, secretario general de la ONU, subrayó siempre que la diversidad cultural es una riqueza y no una amenaza. Mahamat Saleh Haroun, cineasta, ha sabido plasmar en sus películas eldolor de los pobres y los humildes en África.Andrea Riccardi, fundador de la Comunidad de Sant'Egidio, incansableen su defensa de la paz como mediador de conflictos armados. Y finalmente, Antoinette Kankindi, profesora de Ética y filosofíapolítica, y apasionada defensora de la mujer.Cinco hombres y mujeres que han sabido practicar, de palabra y deobra, la solidaridad.
Este libro presenta la trayectoria vital de cinco personalidadesactuales que, mediante libros, artículos, discursos o películas,comparten la misma convicción: la existencia humana no puedeconcebirse sin los demás.Svetlana Alexievich, historiadora y periodista, ha puesto voz a laspequeñas voces. Antonio Guterres, secretario general de la ONU, subrayó siempre que la diversidad cultural es una riqueza y no una amenaza. Mahamat Saleh Haroun, cineasta, ha sabido plasmar en sus películas eldolor de los pobres y los humildes en África.Andrea Riccardi, fundador de la Comunidad de Sant'Egidio, incansableen su defensa de la paz como mediador de conflictos armados. Y finalmente, Antoinette Kankindi, profesora de Ética y filosofíapolítica, y apasionada defensora de la mujer.Cinco hombres y mujeres que han sabido practicar, de palabra y deobra, la solidaridad.