En momentos de zozobra y duda, de torpeza y desengaño, como los quecorren, puede convenir volver la vista atrás e indagar en tiempospasados de parecido tenor. Fijarse en épocas, como las que siguieronal malhadado 1898, de derrotas interiorizadas e inciertos mimbres defuturo, para vislumbrar propuestas críticas, reflexivas, como las que, a principios del siglo XX, hizo Miguel de Unamuno (1864-1936)arremetiendo contra los muchos extraños moradores de la política: lasoberbia, el fulanismo o la ramplonería, la fatuidad o el dogmatismo.