Con la duda como único criterio y el desengaño como actitud vital,Cioran somete al mundo que nos rodea a un examen demoledor, capaz deechar por tierra los más sólidos cimientos de nuestra civilización ynuestras más arraigadas convicciones sobre el tiempo, la historia, elvacío, el arte, la ciencia, la religión, la soledad y el amor. «Todooccidental atormentado hace pensar en un héroe de Dostoievski quetuviera una cuenta corriente en el banco.»