MANCHADO, JOSE ANTONIO / HERNÁNDEZ MANCHADO, JOSÉ ANTONIO
Tendría que haber nacido en los Himalayas! ?gritó desesperado unpaciente que atravesaba una situación un tanto complicada. Esto, almismo tiempo que me inspiraba el título de este libro, me animó a darel paso definitivo para compartir todas estas historias con enseñanzas ancestrales aplicables al mundo moderno. El concepto del Dalai Lamacomo ser humano feliz y pleno es ampliamente aceptado por todos: aquí, en Japón o en el mismo Tíbet. Teniendo en cuenta esta verdaduniversalmente reconocida, surgen las siguientes reflexiones: ¿Quéhace a este ser y a otros seres como él ser tan felices y alegres?¿Qué saben ellos que nosotros desconocemos? ¿Qué nos hemos estado?perdiendo?? ¿Cómo es posible mantener esos estados de paz y de dicha? ¿Nacieron ya así, o es fruto de algún aprendizaje? ¿Cualquiera denosotros, ?simples mortales?, somos capaces de alcanzar esos estados,a pesar de no haber nacido en el Tíbet? A través de las historiasreales de superación y descubrimiento interior expuestas en estelibro, se muestra, de forma clara y sencilla, las claves, métodos yenseñanzas que nos ayudarán a conseguir esos niveles de consciencia,felicidad y alegría plena. En mis frecuentes viajes de descubrimientointerior alrededor del mundo, he tenido la alegria de coincidir condiversos maestros, lamas, monjes y otros seres extraordinarios, de los cuales he aprendido y descubierto efectivos y transformadores métodos que nos conectan con los estados de bienestar de estos maravillososseres que viven en el goce y en el amor constante. Esta obra es unrelato de mis experiencias, narrado con un lenguaje sencillo ypráctico para que todos podamos entender su esencia y saber cómoaplicar todas estas enseñanzas y herramientas milenarias a nuestravida y en este mundo moderno. Si te lo permites, independientemente de tu religión, filosofía, edad o condición, la práctica de algunas delas claves que comparto en este libro marcará un antes y un después en tu vida. Comenzarás a sentirte verdaderamente dichoso, conectado conla vida, con tu verdadera naturaleza o, incluso, como dice el título,más feliz que el Dalai Lama!