El emperador Tiberio es un hombre muy supersticioso. Cuando sedescubre en el desierto egipcio la tumba de una famosa adivina de laantigüedad llamada Berenice, ordena que le hagan una transcripción delos jeroglíficos encontrados. La misteriosa muerte de dos de lospaleógrafos y la desaparición de un tercero llevarán a Tiberio aenviar a Egipto a Estéfanos, un famoso retórico griego metido ainvestigador privado. En el país del Nilo, en compañía de los jóvenesManio y Claudia, hará un sorprendente descubrimiento.