Ratas, de Xaquín Marín, es una joya ilustrada. Una pieza rara yhermosa, tanto si es tomada como historia de ciencia fi,ccióncomo si la consideramos una viñeta ilustrada, cómic o semejante. Así,puede entenderse cómo esta aventura llena de ímprobo trabajo yesfuerzo imaginativo de Marín, que elaboró entre 1974 y 1975, vio laluz en 1977 en Madrid, en castellano, a pesar de estar rotuladaoriginalmente en gallego.
A nadie se le escapa que Ratas tiene, desde el punto de vistagráfi,co, el valor de que cada página es distinta a las demás, yque el texto está integrado en el conjunto, de tal modo que es unelemento gráfi,co más. Todo eso, sin entrar en la introducción de una nueva temática en el incipiente mundo del cómic gallego.