Esta es la historia de un tour de force por las calles de Madrid y superiferia, una novela sobre aquello que no se ve en las postalesturísticas, el relato de una vida contaminada por el odio y ladesesperanza. Pero también hay lugar para otros sentimientos. Y parala música. Sergio Galarza rescata del anonimato las tragedias y losplaceres de una ciudad que tiene mucho que contar, desde Malasañahasta Coslada, desde Alcorcón hasta La Moraleja. El narrador, un joven inmigrante, viaja en metro y en autobús de un lado a otro para llegar a tiempo a su trabajo: pasea perros. Así sobrevive. Parece un oficiosencillo, pero el desamor y la sensación de esclavitud del que trabaja de lunes a domingo, lo hacen tan vulnerable y frágil como los son,por otros motivos, algunos de los personajes con los que se cruza: unanciano con un mapache enjaulado, unas mujeres adictas a la autoayuday aterradas por su rostro, un matrimonio que espera su final y, sobretodo, perros, de todas las razas y tamaños. Sergio Galarza reflexionasobre los cambios que se han producido en las grandes ciudades tras la llegada masiva de nuevos vecinos de otras latitudes. La suya no esuna visión "políticamente correcta", pero se acerca a la verdad que se respira en las calles. Paseador de perros es la primera novela de loque Galarza ha llamado su "Triología Madrileña".