«A un palmo de ti es fácil morderte.Guarda la lengua, que voydirecta,no sea que, al sentirla húmeda,la invite donde guardo ciertosecosy duermen huracanes, allí donde más de uno murió aoscuras,perdiéndose en el intento de encontrar fuego,que cuando quemas es porque hay alma,y cuando hay alma, duelo.»En Mujer océano, VanesaMartín se enfrenta, sin lacomplicidad de la música, a la poesía. Amory desamorson los blancos donde van a dar las palabrasafiladas, a veces estudiadas y a veces rabiosamentelibres, de Vanesa. Una seleccióndepoemas cercanos, urbanos y actuales enlos que late la delicadeza ysensibilidad femenina,pero también el caos y la potenciadel océano.
«A un palmo de ti es fácil morderte.Guarda la lengua, que voydirecta,no sea que, al sentirla húmeda,la invite donde guardo ciertosecosy duermen huracanes, allí donde más de uno murió aoscuras,perdiéndose en el intento de encontrar fuego,que cuando quemas es porque hay alma,y cuando hay alma, duelo.»En Mujer océano, VanesaMartín se enfrenta, sin lacomplicidad de la música, a la poesía. Amory desamorson los blancos donde van a dar las palabrasafiladas, a veces estudiadas y a veces rabiosamentelibres, de Vanesa. Una seleccióndepoemas cercanos, urbanos y actuales enlos que late la delicadeza ysensibilidad femenina,pero también el caos y la potenciadel océano.