Hércules Poirot necesita descanso, y para ello ha escogido un pequeñohotel junto al mar. El relax y la armonía reinan entre los huéspedes.Arlena Marshall, una actriz descaradamente bella y con un talentoespecial para atraer problemas, se convertirá en el objeto de deseo de los hombres y en el centro de las críticas de sus mujeres. Cuandoaparece muerta, todos parecen tener una buena coartada. Poirot harágala de su astucia para resolver un crimen en el que ni los malos sontan malos? ni los buenos tan buenos.«La mejor Agatha Christie desde Diez negritos.» The Observer