Muchos piensan que la comida coreana es compleja y difícil depreparar. En realidad, es muy sencilla. Se requieren una serie deingredientes básicos, pero, una vez que se han llenado la despensa yel frigorífico, todo está a punto para empezar a elaborar deliciososplatos. Mi primer libro de cocina coreana contiene numerosas recetas parapreparar los banchan más populares, el famoso kimchi, exquisitosplatos de fideos, arroz, carne y pescado, bocadillos rápidos ysencillos, e incluso dulces tentaciones. Con todas ellas, loscomensales se sentirán satisfechos y se despedirán diciendo, al igualque los coreanos: «Muchísimas gracias. Ha sido un verdadero placer».