Arrietty es más diminuta que un terrón de azúcar. Y sin embargo es muy valiente, porque con una aguja como espada deberá salvar a toda sufamilia, con la que vive bajo el suelo de un viejo caserón.
Ellos son LOS INCURSORES. No poseen nada y por eso deben vivirpeligrosas aventuras cada vez que quieren «tomar prestada» alguna delas pertenencias de los dueños de la casa: los enormes "serumanos".Así, con mil heroicidades, incursionan en el caserón para conseguirlos carretes de hilo que usan como taburetes, las cajitas lacadas queconvierten en sus camas, y también los sellos que cuelgan de susparedes como si fueran obras de arte.
Estos pequeños grandes héroes no son duendes. Son seres humanospequeñísimos y muy reales, como son reales sus miedos, sus alegrías,sus triunfos y sus amores. Eso descubriremos cuando Arrietty, en elintento de salvar a toda su familia, conozca al chico de la casa, un"serumano" muy especial...y sus vidas cambien para siempre.