La trilogía La Orestea dramatiza la muerte de Agamenón, al regresarvictorioso de Troya, a manos de su esposa Clitemnestra, y la venganzamatricida de su hijo Orestes, junto con el destino ulterior de éste.Se trata de un tema antiguo situado dentro del marco general de losretornos de los héroes aqueos después de la conquista de Troya. Dehecho, es tratado por Homero en varios pasajes de la Odisea. Cuandoeste mito pasó al área cultural doria se enriqueció notablemente: fueel poeta lírico Estesícoro quien introdujo elementos nuevos, abriendoposibilidades dramáticas y dotándole de una dimensión moral de la quecarecía en Homero. Finalmente, Esquilo lo dramatizó, añadiendo unanueva dimensión socio-política, sirviéndose de la trilogíadramáticamente trabada que él mismo había descubierto, estructura a la que el dramaturgo acomoda la puesta en escena del pensamientopolítico, moral y religioso que, como educador de su pueblo, buscabatransmitir: el triunfo del orden de Zeus, representado por lajusticia, sobre el desorden y el caos moral y social provocado por elexceso o hybris, de la razón sobre los instintos y las oscuras fuerzas irracionales. La dramatización de este programa consiste, porconsiguiente, en la puesta en escena de los mecanismos de la justiciade Zeus y del reconocimiento por parte del hombre, a través del dolor, de los mismos. La obra culmina en el tribunal del Areópago con uncanto al orden social y político que representa la incipienteconstitución democrática de Atenas.José Luis Calvo Martínez es Catedrático de Lingüística y Literaturagriega de la Universidad de Granada.