Si el dormir es un cierre al mundo real, el sueño, por su parte, daacceso a todo un material de pensamientos, los «pensamientos oníricoslatentes», que «a la noche pueden engancharse al deseo inconsciente».El sueño es a la vez una actividad de pensamiento (el trabajo delsueño) y una realización de deseo. «La interpretación del sueño es lavía regia hacia el conocimiento de lo inconsciente», concluirá Freud.