Vivimos en las ruinas de los relatos emancipatorios del pasado ycomenzamos a movernos entre los temores y los nuevos sueños que latransformación digital nos trae dentro de un ciclo de expansión de ladesigualdad, cada vezmayor y más estructural. Ante dicho escenario, irrumpen en nuestrasvidas la inteligencia artificial y el internet de las cosas, losdatos, la robótica y las posibilidades del aprendizaje profundo,confluyendo todas estas tecnologías ala vez y mostrándonos, quizás, un camino de esperanza. Un marco deoportunidad que puede ser único y que, si somos inteligentes, lopodemos plantear a la medida de las necesidades de los seres humanos.En este libro evidenciamos la necesidad de la ética como el elementobásico para que así sea. Eso sí, que el uso sea ético no depende de la tecnología sino, como siempre, del uso que hagamos de ella.