Memorias de un joven blanco sudafricano que huye de su país al Londres de los años 60 en búsqueda de sí mismo.«Desde los años sesenta, en que se sirvió de un ordenador Univac 1106para estudiar la prosa de Samuel Beckett, J. M. Coetzee ha sido unarriesgado explorador del lenguaje. Coetzee ha emprendido una obra dealta originalidad para liberar a la palabra de ataduras. Las novelasluminosas y desconcertantes de J. M. Coetzee revelan que la verdad essiempre extranjera.»Javier Marías«J. M. Coetzee es uno de los grandes narradores vivos y de quienMondadori ha editado dos obras perfectas, Desgracia e Infancia.»Félix de Azúa
Memorias de un joven blanco sudafricano que huye de su país al Londres de los años 60 en búsqueda de sí mismo.«Desde los años sesenta, en que se sirvió de un ordenador Univac 1106para estudiar la prosa de Samuel Beckett, J. M. Coetzee ha sido unarriesgado explorador del lenguaje. Coetzee ha emprendido una obra dealta originalidad para liberar a la palabra de ataduras. Las novelasluminosas y desconcertantes de J. M. Coetzee revelan que la verdad essiempre extranjera.»Javier Marías«J. M. Coetzee es uno de los grandes narradores vivos y de quienMondadori ha editado dos obras perfectas, Desgracia e Infancia.»Félix de Azúa