Aquí la realidad se abre camino. Aquí interfieren en las frecuenciasdel tejido poético, como ondas de una emisora de radio clandestina,las voces anónimas y las voces incómodas que narran el conflicto, laviolencia, los crímenes, la hipocresía, la injusticia: nuestro mundo.María Ángeles Pérez López lleva a cabo un ejercicio originalísimo deintertextualidad, trenzando y haciendo dialogar los poemas de otroscon las vidas de otros, para obligarnos a mirar un retrato desolador y amargo de nosotros. La autora propone una revisión propia y necesaria de los nuevos caminos por los que puede transitar la poesía social.Aquí la belleza no nos maquilla, sino que nos despoja de la máscara,mostrando nuestros rasgos más terribles.