El Antiguo Testamento fue escrito en un contexto socioeconómico ypolítico concreto: muchos factores, como la geografía, el medioambiente, las precipitaciones, la literatura existente, la guerra y el hambre, sirvieron para influir en sus autores. La Biblia es hija desu ambiente y con toda probabilidad pasó por fases de edición segúnlos tiempos. La historia muestra cómo los israelitas participaban en las relaciones internacionales de su época. Los documentos de la administración enMari o los anales de Sennaquerib de la campaña contra el rey Ezequías, por ejemplo, así como las excavaciones arqueológicas, proporcionanuna valiosa ayuda para la comprensión de la historia del pueblo deIsrael con el relato bíblico de fondo. En el conjunto de los estudiosdel Próximo Oriente antiguo, los hebreos son actores necesarios comoparte de los pueblos en contacto en la región. Cayetana H. Johnson es arqueóloga en Tel Hazor (Galilea, Israel) y enla Ciudad de David (Jerusalén) y profesora de hebreo, arameo yliteratura rabínica en la Universidad Eclesiástica para Dámaso(Madrid).