Nunca pasa nada en Llobarca, un minúsculo pueblo de montaña cercano ala frontera con Somorra. Tomàs cuida de sus vacas, de su tíosilencioso, de su novia formal, sorteando como puede el colapso de unmicrocosmos condenado a la desaparición. Nunca pasa nada, hasta quepasa algo que perturba tanta placidez: hay movimientos raros en unavieja pista de contrabandistas. A partir de entonces, todo cambia.
Guárdame las vacas constituyó un sonado éxito cuando apareció en 2003, cosechando excelentes críticas y ventas. Y fue traducido al francés.