El error de Descartes lo supo ver, hace ya varios siglos, Spinoza. Elfilósofo holandés, al que Damasio califica de «protobiólogo», teorizóya en el siglo XVII sobre la conexión entre cuerpo y mente,pavimentando así el camino para la moderna neurofisiología. A travésde una asombrosa cantidad de ejemplos reales, Damasio argumenta afavor de esa misma teoría. PeroEn busca de Spinozano es sólo un librode ciencia: es también un recorrido por la historia y la filosofía deSpinoza, y por aquello que nos hace estar vivos, pese a que casi nunca pensemos en ello: los sentimientos.