Londres, 1947. Asediados por el frío invierno, los británicos padecenel racionamiento a pesar de su victoria en la Segunda Guerra Mundial.Pero Buckingham Palace remontará los ánimos de la nación con elanuncio del compromiso de la princesa Isabel.Para Ann y Miriam, bordadoras en el taller de un famoso modisto, laboda es más que una celebración. Han sido elegidas para un honor único en la vida: crear los bellísimos bordados que adornarán el vestido de novia de la futura reina de Inglaterra. Una oportunidad única parauna chica inglesa de clase trabajadora y una emigrada francesa que hasobrevivido al régimen nazi.