A mediados del siglo XIX, el Observatorio de Harvard comenzó, aemplear a mujeres como calculadoras o «computadoras humanas» parainterpretar las observaciones que sus contrapartes masculinasrealizaban por telescopio cada noche. Al principio este grupoincluí,a a las esposas, hermanas e hijas de los astró,nomosresidentes, pero pronto incluyó, a graduadas de las nuevasuniversidades de mujeres Vassar, Wellesley y Smith.
A mediados del siglo XIX, el Observatorio de Harvard comenzó, aemplear a mujeres como calculadoras o «computadoras humanas» parainterpretar las observaciones que sus contrapartes masculinasrealizaban por telescopio cada noche. Al principio este grupoincluí,a a las esposas, hermanas e hijas de los astró,nomosresidentes, pero pronto incluyó, a graduadas de las nuevasuniversidades de mujeres Vassar, Wellesley y Smith.