Los jugadores del Olimpus no pueden contener la alegría: hanquedado finalistas!!! La Copa ya no es un sueño, aunque para ellodeben jugar la final con el San Bruno, un equipo de fútbol superior al suyo. Gonzalo, el entrenador, lo tiene muy claro: solo si aúnanfuerzas, si juegan en equipo buscando cada uno el bien general, soloen ese caso, lograrán vencer al fuerte rival. Hugo, Clara, Mario...están muy emocionados. Y también J.M., pero él..., él solo piensa ensí mismo: en meter goles para convertirse en el pichichi delcampeonato.