Hacia finales del siglo XVI, las temperaturas empezaron a caer enpicado, hasta tal punto que se helaron las aguas de algunos puertosmediterráneos y las aves se congela-ban en pleno vuelo. A mediados del siglo siguiente, el pai-saje europeo vio su entramado social yeconómico trans-formado por completo: cosechas arruinadas, hambrunas,migraciones... El propio pensamiento occidental inició un proceso decambio culminado con el surgimiento de la Ilustración, que combatió la concepción de esos fenóme-nos naturales como señales o castigosdivinos. Más allá de ser un excepcional ensayo histórico, El motín dela na-turaleza se revela como una reflexión sobre los desafíos de lacatástrofe que se avecina, una invitación a pensar, a centrarse enencontrar soluciones imaginativas y durade-ras a las nuevas, profundas y ominosas alteraciones clima-tológicas como hicieron en el siglo XVI las mujeres y los hombres de Europa.