El señor Genaro no es alto ni bajo, ni delgado ni gordo, ni joven niviejo. Es un hombre solitario y tímido, que pasa tan desapercibido que ni siquiera los vecinos lo saludan.Un buen día, en uno de sus solitarios paseos, se encuentra una perraabandonada y a partir de ese momento su vida cambia. Poco a poco, elseñor Genaro dejará de ser un hombre gris y logrará con las notas delsaxofón enamorar a la vecina del piso de al lado.