Pieper delimita el tema del pecado y lo refiere al aquí y ahora denuestro tiempo. Renunciando a todo fácil escolasticismo, muestra laperenne actualidad del pecado en la vida del hombre y al mismo tiempodescubre las hondas raíces que este concepto, hoy netamente cristiano, tiene en la ideología de un Homero, un Platón, un Aristóteles, hastallegar a los grandes maestros de la edad media y especialmente santoTomás de Aquino. Pieper no se contenta con una exploraciónretrospectiva, sino que proyecta este concepto vital en que quedaanclada la responsabilidad del hombre desde el punto de vistacristiano, en los pensadores y los poetas contemporáneos quevislumbran su transcendencia y virtualidad estrictamente humana.