En nuestra sociedad individualizada todos somos artistas de la vida,ya sea por propia elección o por imperativo social. Y esto es así locreamos o no, nos guste o no. Esta sociedad espera de nosotros quedediquemos nuestros recursos y capacidades a dar sentido y dirección a nuestras vidas, aunque para ello no tengamos las herramientas ymateriales de los que sí disponen los artistas en sus estudios paraconcebir y ejecutar su obra. Y somos alabados o censurados en funciónde los resultados que obtenemos, por lo que hemos conseguido o no, por aquello que alcanzamos y perdimos.
En esta nueva obra, Zygmunt Bauman realiza una brillante descripciónde las condiciones en las que elegimos cómo queremos vivir y de laslimitaciones que pueden imponerse a dicha elección. Por último, perono por eso menos importante, nos ofrece un estudio sobre las manerasen que nuestra sociedad, la sociedad líquida e individualizada deconsumidores, influye (aunque no determina) la manera en queconstruimos y narramos nuestras trayectorias vitales.