Austria, casi en la frontera con Yugoslavia. Arroyos, valles, prados?Un mundo rural, campesino, que se expresa en esloveno y apenas sedefiende en alemán. La voz de una niña, una joven, una mujer (eltiempo pasa por estas fascinantes páginas) nos habla de un modoestremecedor pero también poético y familiar. Un padre y un abuelopartisanos que luchan contra los nazis, una abuela que es arrestada ysobrevive (aunque la marcará para siempre) al campo de concentraciónde Ravensbrück, una madre solitaria que huye de la realidad en supequeño ciclomotor?Bosques, vacas, gallinas. Héroes anónimos, delatores, fronteras. Pocas veces se ha contado la vida y la muerte como aquí: con tantacapacidad de evocación y tanta lucidez. Con tanto humor y tantorespeto. ¿Qué hace la Historia en mayúsculas con la vida de la genteminúscula? Malgastada la palabra ética en otros ámbitos, aquí esapalabra confiere al texto un poder admirable: literatura llamada aperdurar.