Mayo de 1908. Un hombre aparece muerto en las inmediacionesde la vallisoletana finca de Canterac. Presenta heridas de armablanca por todo su cuerpo. Irónicamente la justicia acabadictaminando que se trata de un suicidio. La víctima, Primo Cea,un jornalero que acababa de ingresar en la cuadrilla del condede la Oliva, dueño del Castillo de Canterac y de todas susfincas...muy pronto conoceremos toda la verdad. Tras el éxitode «El sillón del diablo», Víctor del Pozo nos vuelve a sumergiren uno de los crímenes que conmocionaron a la Castilla de laépoca. Escrito en el tono habitual al que tiene acostumbrados,articula magistralmente esta novela en la que historia, misterio,crimen y castigo irán de la mano hasta llegar a un inesperadodesenlace.
Mayo de 1908. Un hombre aparece muerto en las inmediacionesde la vallisoletana finca de Canterac. Presenta heridas de armablanca por todo su cuerpo. Irónicamente la justicia acabadictaminando que se trata de un suicidio. La víctima, Primo Cea,un jornalero que acababa de ingresar en la cuadrilla del condede la Oliva, dueño del Castillo de Canterac y de todas susfincas...muy pronto conoceremos toda la verdad. Tras el éxitode «El sillón del diablo», Víctor del Pozo nos vuelve a sumergiren uno de los crímenes que conmocionaron a la Castilla de laépoca. Escrito en el tono habitual al que tiene acostumbrados,articula magistralmente esta novela en la que historia, misterio,crimen y castigo irán de la mano hasta llegar a un inesperadodesenlace.