A falta de ideas, bueno es un recetario. Sabedor de que cada veztenemos menos tiempo para pensar qué hacer para comer, KarlosArguiñano nos propone 365 menús completos para que no repitamos platoni un solo día del año.Raviolis de queso y zanahoria, dorada con arroz verde, codornices conplátano o lasaña de berenjena. En total, más de 365 menús con primero, segundo y postre, 1095 recetas divididas por estaciones que ponensiempre el acento en los productos frescos y de temporada. Además, ellibro propone menús especiales solomillo Wellington, arroz con nécorao rabo guisado, entre otros para las fechas más sonadas delcalendario, como las Navidades.