Una invitación a (re)descubrir la ciudad más romántica del mundo.
Miquel Molina nos ofrece una postal bucólica de Venecia, pero de unaVenecia que todavía no sale en el radar de los turistas de sol ygóndolas. El de Molina es el relato del perfecto flâneur. Nos explicacómo el visitante se tiene que fundir con la masa y seguir el rumbo de la multitud allá donde le lleve, igual que se evita el embate de lasolas contra el casco de un barco amoldándose a ellas. Nos tenemos quedejar arrastrar por la corriente para saber evadirnos en el momentomás oportuno, cuando un callejón oscuro nos llama la atención y nosinvita a la penumbra para bucear en la verdad de Venecia.El retrato de una Venecia desconocida, que no aparece en las guíasturísticas. Un libro que nos invita a degustar los pequeños grandesplaceres de la vida.
Una invitación a (re)descubrir la ciudad más romántica del mundo.
Miquel Molina nos ofrece una postal bucólica de Venecia, pero de unaVenecia que todavía no sale en el radar de los turistas de sol ygóndolas. El de Molina es el relato del perfecto flâneur. Nos explicacómo el visitante se tiene que fundir con la masa y seguir el rumbo de la multitud allá donde le lleve, igual que se evita el embate de lasolas contra el casco de un barco amoldándose a ellas. Nos tenemos quedejar arrastrar por la corriente para saber evadirnos en el momentomás oportuno, cuando un callejón oscuro nos llama la atención y nosinvita a la penumbra para bucear en la verdad de Venecia.El retrato de una Venecia desconocida, que no aparece en las guíasturísticas. Un libro que nos invita a degustar los pequeños grandesplaceres de la vida.