V.S. Naipaul llegó a Inglaterra en 1950 en condiciones algo precarias. Tenía dieciocho años, una beca para estudiar en Oxford, poco dinero y un inmenso deseo de ser escritor y describir el mundo que le rodeaba. Fue una época de dificultades y de alegría, de anhelos y nostalgias,que reflejó en la correspondencia que mantuvo con su padre, figuradecisiva para Naipaul, y con su hermana. Unas cartas llenas deverdades y confusión, escritas con el brío narrativo y el talento quecar acterizarían años después la obra de este premio Nobel, y quecubren el periodo entre su llegada a Oxford y la inesperada muerte del padre en 1953, a la temprana edad de cuarenta y siete años. Desdeasuntos sin aparente interés literario (cuestiones de dinero o de sufalta, muy reveladoras, sin embargo, de la personalidaddel autor)hasta largas y emotivas cartas de añoranza, desde comentarios sobre la universidad y los profesores hasta notas sobre sus progresos en laescritura y la lectura, y su verdadera vocación de escritor, lacorrespondencia de Naipaul dibuja un fascinante retrato de estecontrovertido personaje y magnífico autor. Cartas entre un padre y unhijo es una nueva muestra de la importancia de la literaturaepistolar, una correspondencia que debe leerse como una verdaderaautobiografía, un libro que conmueve tanto como indigna, y unaprivilegiada mirada a la vida íntima del autor con la sórdidaInglaterra de los años cincuenta, su patria adoptada, como trasfondo.