De lo único de lo que se hablaba en Virgin River era de que undesconocido había comprado la iglesia abandonada del pueblo. Alcomprador, le pasaba lo mismo que al edificio: le hacía falta que locuidaran. Noah Kincaid llegó a Virgin River listo para ponerse manos a la obra y dar vida a su flamante adquisición, pero para ello iba anecesitar ayuda. Puso un anuncio en el periódico y se presentó unaextraña candidata. Con su ropa de colores chillones y su peculiarpasado, Ellie Baldwin no parecía adecuada para el puesto. La bella ydescarada Ellie necesitaba un trabajo respetable para recuperar lacustodia de sus hijos. Su valor y su determinación fascinaron a Noah.Ella podía ser el soplo de aire fresco que tanto necesitaba.